Por allí la luna.
La luna de Abril.
Por acá la luna, la luna de Abril.
La mitad de un cuento inconcluso, en una canción de los setenta, una canción de los setenta en mitad de un cuento inconcluso.
¿Que callecita empinada me llevara mañana?
¿las catedrales no me conocen?
Hay una escalera para subir, hay una escalera para bajar.
Diremos por comodidad que son dos escaleras buscando un mismo final.
Tácitamente desaparezco. Es prosódica la culpa. Como se repite el invierno, se repite y no se cansa de jugar siempre las mismas cartas, ocres, en tonos grises, repletas de lagrimitas otoñales, siempre deshojando una única novela, abrigada de intemperie, sacudida por la ausencia.
Esta semana me estuve sintiendo un tanto enfermo, me manifesté en gripe, ya que no encontré palabras para decir, para estallar en lo que cayó. Hay retasos de vos por todos lados, especialmente en la manta que me cubre.
No puedo llegar hasta Primera Junta sin detenerme, con alguna excusa, a preguntarle al señor del kiosco:
"caballero, allí es ¿Primera Junta?".
Solo señala en la dirección que intuía que lo haría. El hombre me ve todo los días, pero ni sospecha que me siento extraviado, que estoy perdido aquí.
¿Como me cocinaran esta noche? ¿la television se pondrá mas verde? Tengo un tv rancio y obsoleto. Se puede decir que hay esperanzas entonces.
Imagino estrictamente contra mi voluntad, en contra del mundo, eso me ofende un poco, pero es lo que ha, es lo que se dicta por estos días, por estos siglos, lo que quien sabe quien dicta.
Imagino, por ejemplo, que vendrás corriendo y te estrellaras contra mi abrazo.
Que dejaras de despertarme tan tarde en la noche, o soy yo quien lo hace ??
Te imagino en un tren, contra la ventanilla, callada, con un libro entre las manos, a medio leer, a media estación de tus sueños.
Eligiendo discos que nunca vas a escuchar (o al menos yo). Sentada en una plaza, o no se, si en verdad, la plaza sentada en vos.
Tengo ganas de que mañana sea mañana. Eso si que fue una estupidez. De eso no tenia ganas, pero ya, los dos sabemos, que no sabemos de que están echas las ganas.
¿Hace tanto que no te veo?
Como desde que tengo seis años, cuando me descubrieron "Ambliopía" y no veía, hacia la derecha, (políticamente correcto) la mitad del mundo, ni la mitad de nada.
Pero de verdad...
Hace tanto que no te veo que la eternidad se esta volviendo algo un poco mas sustancioso.
Hoy la inspiración falto a la cita. Pero vine yo y me entregue al intento.
¿Y dios? ¿Se escondió en la lampara de Aladino?
Sabe que se como sacarlo de allí. Sabe que se donde encontrarte.
Tengo tres deseos.
Me voy a gastar los tres de un solo saque. Uno por cada copa que bebería. Estimo que esa sera mi próxima genialidad.
La genialidad de estos días.
Pd: "no tengo miedo al invierno, con tu recuerdo lleno de sol".
La luna de Abril.
Por acá la luna, la luna de Abril.
La mitad de un cuento inconcluso, en una canción de los setenta, una canción de los setenta en mitad de un cuento inconcluso.
¿Que callecita empinada me llevara mañana?
¿las catedrales no me conocen?
Hay una escalera para subir, hay una escalera para bajar.
Diremos por comodidad que son dos escaleras buscando un mismo final.
Tácitamente desaparezco. Es prosódica la culpa. Como se repite el invierno, se repite y no se cansa de jugar siempre las mismas cartas, ocres, en tonos grises, repletas de lagrimitas otoñales, siempre deshojando una única novela, abrigada de intemperie, sacudida por la ausencia.
Esta semana me estuve sintiendo un tanto enfermo, me manifesté en gripe, ya que no encontré palabras para decir, para estallar en lo que cayó. Hay retasos de vos por todos lados, especialmente en la manta que me cubre.
No puedo llegar hasta Primera Junta sin detenerme, con alguna excusa, a preguntarle al señor del kiosco:
"caballero, allí es ¿Primera Junta?".
Solo señala en la dirección que intuía que lo haría. El hombre me ve todo los días, pero ni sospecha que me siento extraviado, que estoy perdido aquí.
¿Como me cocinaran esta noche? ¿la television se pondrá mas verde? Tengo un tv rancio y obsoleto. Se puede decir que hay esperanzas entonces.
Imagino estrictamente contra mi voluntad, en contra del mundo, eso me ofende un poco, pero es lo que ha, es lo que se dicta por estos días, por estos siglos, lo que quien sabe quien dicta.
Imagino, por ejemplo, que vendrás corriendo y te estrellaras contra mi abrazo.
Que dejaras de despertarme tan tarde en la noche, o soy yo quien lo hace ??
Te imagino en un tren, contra la ventanilla, callada, con un libro entre las manos, a medio leer, a media estación de tus sueños.
Eligiendo discos que nunca vas a escuchar (o al menos yo). Sentada en una plaza, o no se, si en verdad, la plaza sentada en vos.
Tengo ganas de que mañana sea mañana. Eso si que fue una estupidez. De eso no tenia ganas, pero ya, los dos sabemos, que no sabemos de que están echas las ganas.
¿Hace tanto que no te veo?
Como desde que tengo seis años, cuando me descubrieron "Ambliopía" y no veía, hacia la derecha, (políticamente correcto) la mitad del mundo, ni la mitad de nada.
Pero de verdad...
Hace tanto que no te veo que la eternidad se esta volviendo algo un poco mas sustancioso.
Hoy la inspiración falto a la cita. Pero vine yo y me entregue al intento.
¿Y dios? ¿Se escondió en la lampara de Aladino?
Sabe que se como sacarlo de allí. Sabe que se donde encontrarte.
Tengo tres deseos.
Me voy a gastar los tres de un solo saque. Uno por cada copa que bebería. Estimo que esa sera mi próxima genialidad.
La genialidad de estos días.
Pd: "no tengo miedo al invierno, con tu recuerdo lleno de sol".
No hay comentarios:
Publicar un comentario