Razones.

A David Almada.
A su amistad forjada en el acero del espíritu.

Sobradas razones para estar cansado. El alma es un lugar donde no siempre bien se descansa.
Que hacer cuando se ama así, irremediablemente.
Que loco NO remedio, en la época donde hay pastillitas para todo...
Y para todos.
Me duele acá, tomate esto, me duele allá, tomate aquello.
¿Que loco la locura no?
Yo estoy aquí, inesperado y en espera. Olvidado de todo, recordando quizás lo que conviene. Siempre fui un tipo de fe. Pero en Dios yo no descanso, mas bien me perturbo.
El amanecer es una historieta imperfecta, de viñetas desordenadas, maravilloso por el poniente se asoma un sol de otoño, frío, insensible quizás para estas horas, pero universal...
Si yo pudiera querer mas lo que quisiera querer no seria exacto, mas bien es mi condición humana e inexacta de querer de forma irreverente, como vivo, consecuente con este humor inestable es mi amor, mi amor cotidiano, casual, causal, centro y eje de mi matriz, decisión única de mi condición en la vida.
Si las borracheras de antaño fueran la antología de mañana, nunca yo seria un atinado futuro, necesariamente porque se quiere en PRESENTE.
Se quiere hoy.
Mañana quien sabe donde nos pone el corazón y la vida.
Casi ya no duermo, y cuando lo hago tengo oníricos trances de felicidad, despertar es el primer desengaño del hombre. A veces, las menos, realmente una salida.
La muerte es un dama de seducción imperegne.
¿Que habrá allí que todos van hacia allá?
Las hojas caen una detrás de otra, en una danza de estación, en leves movimientos, pausados, etéreas, imaginarias, impregnados de una melancolía indescriptible. Matinales.
Yo me pregunto y me pregunto como un valiente debe avanzar sin retroceder el corazón...
Como el corazón se antepone ante las decepciones de los días, de los Martes, de los Miércoles, de Agosto, de Julio, como un corazón atraviesa el invierno existencial...
Hay determinadas situaciones a las que un hombre común nuca se acostumbrara. Si al olvido. Si al tedio. Si a la mueca boba de las horas. NO a la resignación, jamás.
Quisiera escribir eternamente, escribir convencido de lo que estoy haciendo. Sin cruces, sin miedo, sin opinión ni postura. Escribir por instinto, si es que lo tengo. Y si no es así, por sospecha. En los tonos del corazón, en armonía con el cosmos, con el espejo el espanto y la dicha.
Razones. Una y otra vez razones. Las tuyas, las mías, las de él, ella y el otro. Razones. Una y una y otra mas. Razones por todos lados. NO sos vos, soy yo. Soy yo, no sos vos. Sobran razones para el desencuentro, el mundo esta diagramado así. Protesta. Grita. Llora. Reite. Te va a volver a pasar. ¿Sabes por que ?
Razones.
Pregunta en el mercado, en la esquina, en la iglesia y en el bar.
Dios tuvo razones. Hitler y Mahoma, Gandhi, ala y aladino, Clasius Clay, mi vecino, tu hermana, el policía triste que se muere de frió, la mujer de tus sueños y la vedette del montón, el que te roba, el que te manda, el que nunca se va a dar cuenta de nada, el violador y el violado, el que se olvido de llamar, el ciego y el tonto... Todos destilan razones.
Razones para preguntar.
Ey tu...
Me quieres !?
Que puede importar la razón ante la ansiedad de la pregunta.

" que un sueño acabo ya te dijeron, pero no, que todos los sueñitos no"
Pura Suerte.
Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota.