domingo, 31 de agosto de 2008

POESIA A LA CARTA.


Batallas

Volviendo del abismo
con el sabor desnudo
del desencanto,
después de haber
palpado la lágrima
del todo,
soy hombre vencedor
de la muerte y de Dios.
Ahora solo me falta
enfrentar al prójimo.


Mareándose con su propio arte


No me encuadres
tan certera.
Me has esculpido
hasta el punto
de no entender
tu propio arte
de demoler.

Santiago Zambianchi.
El condimentador.

Elegí estos dos pero podría haber elegido cualquiera de todos los que tengo,
pero me quede con estos, aún no se porque. ¿O lo sé y no lo resisto?
Quizás por provocadores y soberbios. Por su buena lactancia.
Porque te conozco. Y orgulloso lo digo. Y conozco a tus fantasmas, como se que vos conoces los mios.
Hoy por la tarde te comentaba lo que le comentaba a una poeta amiga, que tu también conoces y has leído, que para mi primero esta el hombre, luego el hombre que escribe, luego el escritor, y por último, aunque no por eso menos importante, su obra. A mi entender, esta cuadratura es indivisible.
Hoy hablo del amigo que escribe, y que además se da el lujo de hacerlo bien.
Me diste la alegría de verte de pie, y por eso te agradezco, yo que conozco la lona, la silla sola del rincón, la trompada y el buen golpe, pero no la toalla, te digo gracias "boxeador" de versos, artero púgil de estilo. Gracias Santiago por la poesía y sus sugerencias. Por todo lo que das, y aun, con injusticia desmedida no te ha vuelto como corresponde.
Siga escribiendo maestro.
Quien se considera y lo considera un amigo.
Con lo bueno, y con lo malo mucho mas.
Como te dije una vez "no tan distintos".
Gracias por la poesía.

Nunca nos deberemos el abrazo.

1 comentario:

Sanchestelman dijo...

no digo de sentirme orgulloso porque esa palabrita parece una moto XR 600,pero si puedo decir que estoy muy contento de que usted, amigo del alma, me tenga tan en cuenta.
Muchas gracias por tido lo que me ha dado y me da, realmente soy un tipo afortunado