viernes, 9 de abril de 2010

LOS CIMIENTOS DEL POEMA

Yo que vi a las gaviotas de gaviotas, en un cielo que no podia ser otra cosa que aquel cielo, (que vi con sus gaviotas), extraviado en el extravio de ver perplejo, tieso, un cielo con gaviotas, un tren a lo lejos persiguiendo el vuelo de los vientos, frases sueltas en el jardín de la poesia, campo adentro, brisa brava.
Y vi mas...
Vi una caravana de dragones hacia el mar, barcos en el puerto de mis sueños que zarpaban con presicion irregular como el pulso de las olas en el compas de la rompiente, al despetar; y vi conejos, vi camellos en la sed, flores de coral en el desierto del inmsonio de un recuerdo ojos abiertos.
Y vi todo, y vi mas...

4 comentarios:

Marina Agra dijo...

Ojalá en verdad todavía no hayas visto todo! Salut, Cochinillo!

El Cochinillo exquisito. dijo...

argumento incuestionable, usted tiene razon, aun yo no la he visto.

Cariños.-

julián dijo...

El peligro que conlleva ver todo, tal vez sea, la muerte ineludíble del deseo.
"ver todo mata el deseo". es por eso que yo siempre me niego a que la verdad es toda", siempre es a media, tenemos palabras...suelen no llegar... Abrazo nene

beyce dijo...

Bueno! una sorpresa J.L. Te leí en La Posta del 29-08

Abrazo en poesía